miércoles, 29 de junio de 2016

¿Qué significa el Internet de las cosas?

La mayoría recordamos de cuando éramos chicos, ver los capítulos de Los Supersónicos, y soñar con tener una casa inteligente, toda interconectada, donde apretando unos simples botones, la cena estaba lista para cuando llegáramos de trabajar.

¿Y hoy estaremos cerca de lograrlo?


Definiendo el término Internet de las cosas


Cuando hablamos de Internet de las cosas o Internet of things en inglés, nos estamos refiriendo a la interconexión de los objetos cotidianos a Internet.

Esta conexión a Internet permite que se puedan programar eventos específicos en los objetos de manera remota, sin necesidad de que un ser humano esté interactuando en vivo con ellos.

El concepto original surgió en el año 1.999 y fue propuesto por Kevin Ashton en el Auto ID Center del MIT. En ese momento se estaba investigando el campo de la identificación por radiofrecuencia en red y tecnologías de sensores.



¿Qué requisitos debe cumplir un simple objeto para convertirse en un objeto inteligente interconectado?

Tiene que contar con un sensor que registre la información que le llega, un procesador para poder gestionar toda la data ingresada, y conexión para poder enviar y recibir órdenes.


¿Cómo puede llegar a influir esto en nuestro estilo de vida?

Veamos algunos ejemplos

  • La heladera podría chequear el estado de los productos que se encuentran dentro de ella, avisando cuando están por vencerse, o también podría conectarse y hacer el pedido al supermercado cuando alertara de un faltante.
  • Podríamos programar la calefacción, iluminación y ventilación de la casa mediante sensores, a distancia, para poder ir aclimatando el lugar antes de nuestra llegada o por el contrario para que se ahorre energía cuando nos vamos.
  • Relojes inteligentes podrían monitorear nuestra salud, alertándonos de que visitemos a nuestro médico, ante la detección de ciertos cambios en nuestros signos vitales.
  • Lavarropas que no solo se programan a distancia, sino que también cuentan con botones inteligentes que encargan la compra de jabón o suavizante cuando nos quedamos sin ellos.
  • Desde el Smartphone podríamos configurar que cuando suene la alarma del despertador, tanto la cafetera, como la tostadora preparen el desayuno, para que esté listo cuando estemos levantados.




Pero… ¿Todo es color de rosas en un mundo de objetos interconectados?


Es obvio que contar con una red inteligente a nuestro alrededor, nos facilitaría mucho nuestra vida, y todos estos adelantos, ayudarían en temas de salud, ahorro de energía y todo lo referente a la automatización y control de procesos.

Pero hay que tener en cuenta que para que esto siga evolucionando, todas las empresas productoras, tendrían que seguir los mismos protocolos de elaboración, para que todos los objetos “hablen” en el mismo idioma y puedan realmente comunicarse entre sí.

También hay que contar con un buen sistema de redes de Internet, que soporte tantas conexiones a la vez, de manera eficiente y rápida.

Y un punto muy importante es que nuestra seguridad podría verse vulnerada, al estar todo conectado, con solo acceder a nuestro celular se tendría acceso a la administración de muchos de nuestros bienes, y a información de nuestro estilo de vida, intereses y gastos, poniendo en jaque toda nuestra privacidad.

Creo que con el correr del tiempo, todos los sistemas seguirán evolucionando, y estos temas encontrarán una solución para que podamos disfrutar de las bondades y oportunidades que nos ofrece el Internet de las cosas, y así finalmente podamos decir que nuestra casa se parece a la de los Supersónicos.


Para conocer más sobre la temática


Les recomiendo estas infografías realizadas por el Centro de Innovación del BBVA para que puedan observar los alcances del Internet de las cosas:

Hogar conectado

Así cambia nuestra vida

jueves, 11 de junio de 2015

Unidad 2 - Actividad 2 - #eduPLEmooc

Gestión de la información


Vivimos siendo abordados, por datos y mensajes, que nos llegan desde los distintos, dispositivos y ámbitos que utilizamos y habitamos.
Toda esta información, por momentos nos aturde, ya que puede llegar de manera descontextualizada y abundante.
En este caos informativo, es muy importante que los alumnos desarrollen la competencia de gestión de la información.
Que puedan entender, a qué prestarle atención y en qué momento o circunstancia. Saber qué fuentes son confiables, según las temáticas que se están tratando. Saber a dónde acudir, cuando necesitan resolver algún trabajo o cuestión.
Y los docentes o adultos, tenemos un muy importante papel, ya que podemos ser sus guías o ayudantes, que los orienten o asistan con los criterios de búsqueda, en los chequeos de fuentes, en cómo procesar y resguardar esa información para poder recuperarla en otra oportunidad.


Propuesta de herramientas para mejorar la gestión de la información:

 


 



  • Y a través de la herramienta Scoop.It! podemos editar, crear y compartir información, agrupándola por temáticas, para una más sencilla recuperación.